Hace 92 años: 7 de Abril de 1925. La Candelaria pasa por los Jardines de Murillo

Hoy es Viernes de Dolores, aquel año Martes Santo. La Hermandad de Nuestro Padre Jesús de la Salud y María Santísima de la Candelaria realizaba su cuarta estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral. En sus tres primeros años de existencia ensayó diversos itinerarios para llegar a la carrera oficial, sorteando con cierta dificultad la estrechez de las calles cercanas al templo y todo tipo de obstáculos en la vía pública.

La junta de gobierno idea acceder a la Carrera Oficial por un nuevo itinerario: recorrer la calle San José y Santa María la Blanca hasta la antigua calle Retiro y discurrir por el Paseo de Catalina de Ribera, los Jardines de Murillo, atravesar el barrio de Santa Cruz por las Teresas y alcanzar Mateos Gago en las horas de luz de la tarde, y el itinerario inverso en la oscuridad de la noche. La bella estampa de ambos pasos, acompañados de poco más de un centenar de hermanos nazarenos, se repite en 1926 y 1927.

Ya lo recordaba José Martínez-Agulló y Márquez, pregonero de la Semana Santa de Sevilla en 1964:

“Luego vino aquello del paso de la Virgen que en una de las calles del barrio tropezaba con un balcón; y todos los años, el balcón, con autorización del dueño de la casa se quitaba y después se volvía a poner al día siguiente. Pero llegó un año -hace cuarenta ahora- que el dueño de la casa dijo que no, que el balcón no se quitaba. Hubo que variar la carrera. Para mejorar pues, la Hermandad tuvo el acierto de regresar a su templo por los floridos jardines de Catalina de Ribera y Murillo, donde la Virgen luce más.»

A partir de 1928 solo pasa por el Paseo de Catalina de Ribera y los Jardines en el itinerario de regreso, accediendo desde la calle San Fernando y recorriéndolos por tanto en toda su longitud, tal como desde entonces conocemos y se ha convertido en una de las escenas más bellas de nuestra Semana Santa, donde se congregan multitud de sevillanos y forasteros. Ya lo reconoció el prestigioso cofrade Luis Ortiz Muñoz en su Pregón de la Semana Santa de 1943:

“… o cuando Nuestra Señora, cual primavera de gloria, atraviesa, como dentro de un fanal luminoso, apagadas las luces públicas, los Jardines de Murillo».

Y para finalizar esta primera entrega de la conmemoración del 50 Aniversario del nombramiento como co-patrona del Servicio de Parques y Jardines del Excmo Ayuntamiento de Sevilla, consecuencia directa de éste bellísimo prólogo que hoy compartimos con los hermanos de la Candelaria y con todos los cofrades sevillanos, terminamos con las palabras que le dedicó Francisco Sánchez-Apellániz Valderrama en su Pregón de Semana Santa de 1961:

» Luz y Candela encendida, como en la noche del Martes Santo entre la fronda de los Jardines de Murillo, que nos alumbra el camino para llegar a la misma luz increada, que no tuvo principio ni tendrá fin.»