Quinto día de Solemne Quinario 2020
En este último día de Solemne Quinario, nos explica el Reverendo que el Milagro del pan y del vino es el más grande porque allí el señor se nos presenta siempre.
Hoy le pedimos a Mª Santísima de la Candelaria que nos enseñe a mirar al Señor como Ella lo hace y lo mira de tres maneras
Cuando nació de su vientre en Belén, ella lo miró con asombro y ternura, no nos podemos acostumbrar a mirar al Señor cargando con la cruz, debemos asombrarnos siempre que lo veamos y también hay que verlo con ternura. Cada vez que comulgamos debemos sentir a Dios.
La otra mirada es en las boda de Canaan, cuando el Señor convierte el agua en vino porque la Virgen le pide que lo haga, porque le dice a su Hijo que lo están necesitando, puesto que el vino simboliza la alegría. Debemos ser capaces de mirar los milagros como la vuelta a la alegría, debemos aprender de la Virgen a buscar al Señor cuando lo necesitamos.
La tercera mirada es en el Calvario, ella se mantiene de pié junto a su hijo clavado en la cruz, mirándolo con sufrimiento pero sin perder la esperanza. Porque el Señor siempre vence, lo único que tenemos es que no perder la esperanza y tener paciencia. La Virgen nos enseña a soportar los avatares de nuestra vida con esperanza.
El Señor de la Salud no nos abandona, quiere seguir caminando con nosotros todos los días de nuestra vida y para ello debemos mirarlo como nos enseña María Santísima de la Candelaria, con el asombro y la ternura de Belén, con la búsqueda y la confianza de Canaan y con la esperanza del Calvario.