D. Miguel Ángel Núñez Aguilera Hermano Honorario
Estimados hermanos, queremos anunciaros que en la tarde de ayer , se nombró a nuestro párroco y director espiritual a D. Miguel Ángel Núñez Aguilera como Hermano Honorario de la Hermandad por la labor tan encomiable que ha realizado para reconfortar nuestras almas en los días tan duros que esta pandemia nos está dejando.
A continuación os dejamos el texto que nuestro Hermano Mayor D. Álvaro Delgado Gómez leyó para este acto.
Desde el pasado mes de marzo, nuestra Hermandad vive sin duda una de sus etapas más difíciles de su ya casi centenaria historia.
El día 14 de Marzo del año en curso, El Gobierno de España decretaba el estado de Alarma para intentar dar respuesta a la gravísima crisis de salud pública originada por la pandemia de COVID-19, que ocasionaba efectos graves en buena parte de la población así como una elevada mortalidad.
Como consecuencia de ello, todos nos vimos confinados en nuestros domicilios, afectando a cualquier actividad humana no considerada como esencial. Esta situación se prolongó en el tiempo casi durante tres meses, hasta ya entrado el mes de Junio, en el que de manera gradual fuimos retomando la normalidad en nuestras actividades del día a día, si bien con ciertas limitaciones que todavía hoy, casi 7 meses después aún perduran.
En este periodo de tiempo, nuestra Hermandad tuvo que interrumpir ciertos actos y eventos propios de los días de Cuaresma. No obstante, la parte más difícil de llevar fue el no poder acercarnos por San Nicolás, debido a las restricciones en la movilidad legisladas por el Gobierno. Ello nos imposibilitaba postrarnos ante sus pies para rogarle, ahora más que nunca, esa SALUD que siempre le hemos pedido y nunca dejaremos de hacer. Y tampoco podíamos mirar a los ojos de Nuestra Madre Candelaria para encontrar esa Luz Candelaria que iluminara nuestra vida. Pero lo peor estaba aún por llegar; este año, no habría Martes Santo. Su paso se quedó a medio montar. No existen las palabras que describan una situación que no se conocía en la Ciudad ni en la Hermandad desde los lejanos tiempos de la guerra y que puedan explicar el desconsuelo y tristeza que albergaban todos los corazones candelarios.
Y en esta triste e inédita situación, emergió una luz, que en forma de mensajes de WhatsApp, cada palabra, cada vídeo, cada fotografía… nos llenaba a todos el corazón. La dedicación exclusiva de D. Miguel Ángel a todos los feligreses de la Parroquia de San Nicolás y Santa Mª la Blanca en general y a la de todos los hermanos de La Candelaria en particular, será nuestra deuda eterna con él. No sólo se puso al servicio de la Hermandad en lo material… fueron muchas las gestiones a las que hizo frente en nuestra ausencia, sino que supo mantener el ánimo y sosegar nuestras almas en esta delicada situación.
Por todo ello, y entendiendo esta Junta de Gobierno que queda sobradamente acreditada la especial y relevante actuación al servicio y beneficio de la Hermandad, y en virtud de lo establecido en la Regla 16ª de las que nos rigen, por deliberación unánime del cabildo de oficiales proponemos a este cabildo General: