Nuestra hermana María de los Reyes Delgado pronunció la Exaltación de la Juventud del Martes Santo
El pasado sábado 19 de noviembre, nuestra hermana María de los Reyes Delgado García pronunció en la iglesia de Omnium Sanctorum la Exaltación de la Juventud del Martes Santo. Es un acto que organiza anualmente la Hermandad de los Javieres, que en ediciones anteriores también ha sido protagonizado por jóvenes candelarios como José María Cuadro de los Reyes y Paula Fernández Martín.
En esta ocasión, María Delgado hizo gala de una disertación de alto nivel a pesar de su juventud, con una clara dicción cargada de emoción, sentimientos y vivencias, siendo interrumpida en varias ocasiones por los aplausos del público. Además de sus referencias a los titulares de las Hermandades del Martes Santo, hizo un elogio brillantísimo de la juventud cofrade de Sevilla, toda una declaración de intenciones que reproducimos a continuación. Un ejemplo a seguir por los jóvenes que nacen y se forman espiritualmente en el seno de nuestras hermandades y cofradías.
La juventud es optimismo, coraje, y entrega.
que se lo digan al chaval, que lleva ya diez igualás
y allí seguirá estando el primero,
hasta poder ser quien lleve a su Virgen al son del compás.
O a la niña que año tras año ha asistido a todos los cultos
hasta tener la edad y los puntos necesarios
para con el cirial a su Cristo ir alumbrando.
Los jóvenes vamos creciendo en ilusión por hacer, por aprender,
y esa pasión es la que nunca podemos perder.
Debemos siempre guardarla
para transmitirla a las generaciones que vengan después.
Que ser Sal y Luz del mundo
es y será nuestro deber.
En algo nuevo siempre andamos pensando
pues está en nuestro espíritu emprender
Pero muchas veces nos tachan de insensatos
y pretenden atarnos los pies
No se dan cuenta de que es ese entusiasmo
el que nos da la capacidad para reinventarnos una y otra vez.
Y que si no fuéramos capaces de adaptarnos
muy fácilmente nos hubieran podido vencer.
Si algo caracteriza a este día
es el espíritu joven que ha demostrado tener.
Un plan nuevo cada año
hasta hallar la fórmula que mejor resultado nos dé
que nuestro sentimiento es algo muy grande
como para poner en juego nuestra mayor protestación de fe.
Está en nuestras manos
que nunca nuestra tradición más preciada se pueda mantener
Ilusión, entrega, adaptación,
Y sobre todo, compromiso para con Ella y con Él,
Con los zancos siempre en el suelo
pero buscando llegar al cielo
¡Tos por iguá, valiente!
La JUVENTUD DEL MARTES SANTO
y ¡venga de frente con Él!